La próxima edición de la feria
Equiplast tendrá en el foco todos los aspectos con la circularidad de los plásticos o la creciente presencia de alternativas a los plásticos provenientes de materia fósiles. La mayor presencia de bioplásticos en nuestras vidas es ya una realidad. De hecho, desde hace algún tiempo, los bioplásticos se utilizan para algo más que para fabricar bolsas de basura o films para acolchados en la agricultura. Los biopolímeros se encuentran cada vez más en productos duraderos de alto rendimiento, por ejemplo en aplicaciones exigentes de automoción, carcasas para la industria electrónica o materiales para la industria de la construcción.
Los plásticos y los envases desempeñan un papel fundamental en el 'Plan de Acción para la Economía Circular'.
La biodegradabilidad es a menudo una ventaja, por ejemplo para películas de envasado, vajillas desechables o implantes médicos. Pero lo cierto es que existen versiones ?bio? para prácticamente todos los tipos y aplicaciones de plásticos. El ácido poliláctico (PLA), por ejemplo, es el principal material utilizado para la impresión 3D. Según algunos informes, las ventas de bioplásticos alcanzarán los 9.700 millones de dólares en 2031.
Plásticos renovables y compostablesLos bioplásticos aportan numerosas ventajas: protección del medio ambiente, independencia del petróleo y del gas natural, productos más ecológicos y nuevas oportunidades para la agricultura. Sin embargo, también existe una gran confusión en torno a estos materiales, ya que actualmente no existe una definición generalmente reconocida de bioplásticos ni un etiquetado uniforme. Existen dos grupos de materiales que pueden solaparse, pero no siempre tienen por qué ser idénticos. Uno de ellos son los plásticos biodegradables, que pueden ser descompuestos por microorganismos en la naturaleza o, al menos, compostados en plantas industriales. El otro grupo está compuesto por los plásticos de base biológica, que se producen a partir de materias primas renovables.
El Grupo Operativo ACBD está formado por distintos socios como Fruca Marketing, Proexport, Kernel Export, BF Agrícola 4G, Campo de Lorca SCL y Verdimed SAU.
Algunos bioplásticos cumplen ambas condiciones. El PHA a partir del azúcar y el TPS a partir del almidón, por ejemplo, son biobasados y biodegradables. Sin embargo, también hay plásticos fabricados a partir de materias primas biogénicas que no son compostables, por ejemplo el PEF a partir de fructosa o el biopolietileno a base de caña de azúcar. Por el contrario, algunos plásticos producidos a partir de petróleo crudo o gas natural, pueden ser biodegradables, como el PCL, el PBAT o el PBS.Polímeros ecológicos para la economía circularLos plásticos y los envases desempeñan un papel fundamental en el 'Plan de Acción para la Economía Circular' publicado por la Unión Europea como parte de su 'Pacto Verde' para superar la sociedad del usar y tirar y reducir los residuos. La Comisión Europea está trabajando en un nuevo marco político sobre plásticos biobasados, biodegradables y compostables. En él se definirá claramente qué se entiende por bioplásticos y cómo deben eliminarse. El proyecto se complica aún más por el hecho de que cada vez se añaden más componentes de biomasa a los plásticos fósiles para reducir su huella de carbono. Hasta ahora no se ha definido en qué proporción de materias primas renovables puede comercializarse como bioplástico una mezcla de polímeros 'bioatribuida' o 'equilibrada en masa'. Los plásticos obtenidos con ayuda de organismos modificados genéticamente también son controvertidos. En cualquier caso, la Comisión Europea quiere evitar el 'greenwashing': los bioplásticos sólo deben utilizarse si ofrecen "auténticas ventajas ecológicas" frente a los plásticos fósiles y no compiten, por ejemplo, con la producción de alimentos.
Los plásticos biodegradables, por ejemplo, los ácidos polilácticos (PLA) y los polímeros de almidón, alcanzaron una cuota de mercado del 65% del mercado total de bioplásticos en 2021.
Mayor crecimiento de los ácidos polilácticos y el almidónLos plásticos biodegradables, por ejemplo, los ácidos polilácticos (PLA) y los polímeros de almidón, alcanzaron una cuota de mercado del 65% del mercado total de bioplásticos en 2021. Para este grupo de productos, un informe realizado por Ceresana espera un crecimiento adicional del volumen del 10,4% anual hasta 2031. Para los plásticos de base biológica que no son biodegradables, como el polietileno, el PET o el PA, se espera un crecimiento inferior, del 7,5% anual. El último informe de mercado de la citada empresa analiza cómo está evolucionando el uso de los bioplásticos en los distintos mercados de venta. El área de aplicación más importante en 2021 fue la industria del envasado: El 58% de todos los bioplásticos se procesaron en esta área. Se espera la mayor tasa de crecimiento en el segmento de 'bolsas y sacos'.